¿Cuál práctica, por si sola, puede cambiar mi vida?
- Kharim Maluf Jorge
- 7 may 2024
- 2 Min. de lectura
Si me preguntaran: ¿Cuál práctica, por si sola, puede cambiar mi vida? Debo confesar que muchas cosas vienen a la cabeza: la actitud que tomamos ante la vida; el tomar responsabilidad de nuestra vida; cambiar la percepción de cómo vemos las cosas; etc.
Sin embargo, creo que terminaría respondiendo: GRATITUD.
¿Por qué?
Quiero comenzar pidiéndoles que hagan una reflexión sobre esta frase: “Es imposible sentirse agradecido y triste al mismo tiempo”.
En el preciso momento que nos sentimos realmente agradecidos, lo que nos invade es literalmente amor, plenitud, y un sinnúmero de emociones positivas. ¡Nada negativo!
Ciertamente, todos pasamos por momentos en la vida y en nuestros días. La ley de ritmo que tiene una clara aplicación en la naturaleza, también aplica en nosotros. La marea baja y sube. Las olas van y vienen. Tenemos días más lentos que otros, y etc. Sin embargo, cuando sentimos esa “gratitud”, la “marea baja”; es más fácil sobrepasarla. Y es que, en mi opinión, nosotros como seres humanos con alma tenemos una conexión con algo superior. Que se llame Dios, energía universal, inteligencia universal, universo, lo uno, el todo, eso dependerá de las creencias de cada quien.

Una de las formas que logramos mantenernos más activamente conectados a esa fuente superior es precisamente a través del agradecimiento. De un sentimiento profundo de gratitud hacia todo lo que ocurre, ya sea que lo consideremos “bueno” o “malo” para nosotros. Por demás, el demostrar gratitud es una de las aplicaciones más grandes de la verdad de que no podemos controlar todo los que nos ocurre, pero siempre podemos controlar nuestra reacción hacia esas cosas.
Ahora, ¿cómo trabajar la gratitud?
Para mí, se trata de dos cosas: Enfoque y perspectiva.
1) Enfoque: Existe una ley del universo que se llama Ley de Polaridad o Dualidad. Todo tiene su opuesto. Hay día y noche; sol y luna; verano y invierno; adentro y afuera, etc. Igual, toda
moneda tiene dos caras. Entonces, la pregunta clara es: ¿en cual cara te vas a enfocar? ¿Te vas a enfocar en lo que no tienes, o vas a agradecer lo que tienes?
2) Perspectiva: No creo, en principio, que es bueno comparar. Creo que cada quien vive su proceso y sus retos. No obstante, sí creo que, sin entrar a particularidades de comparaciones con otras personas, es importante siempre recordarse que: PUDIERA SER PEOR. No importa la situación que estemos viviendo, siempre podrá ser peor, y por esa misma razón debemos ser agradecido.
Utilizando estas dos herramientas, te recomiendo el siguiente ejercicio: cada día (cuando te acuestes o te levantes), haz una lista de por lo menos 3 cosas por la cual estás agradecido/a. Escríbela si te es posible. Cuando escribas cada una, piensa en lo que representa cada cosa sobre la cual estás agradecido/a.
Siéntelo, realmente involúcrate emocionalmente, no lo hagas como un ejercicio
intelectual, vívelo. Habrá días en que será más fácil que otra. Lo que si te aseguro es que siempre encontrarás muchos más que 3. Es más, si realmente lo piensas, puedes escribir 100 cosas y más por día.
Kharim Maluf Jorge